Ingredientes para un molde de 22 cm
- 1 paquete de pasta brisa
- 3 huevos.
- 200 ml de nata.
- 1/2 vaso de leche (100 ml).
- 100 g de panceta.
- 1 cebolla grande.
- 100 g de queso (puede ser gruyere, emmental, o incluso probar con algún queso azul o de cabra, a tu gusto!)
- Pimienta negra y sal, y tus especias o hierbas favoritas: orégano, tomillo, romero
Preparación
- Precalienta el horno durante unos 10 minutos a 180ºC, que es el tiempo que vas a tardar en estirarla y montarla en el molde.
- Para que se hinche lo mínimo posible, pínchala con un tenedor y además coloca encima papel de horno y legumbres o algún molde que quepa en el interior, para añadir peso encima y que no se hinche durante el horneado.
- Hornea durante 10-12 minutos, evitando que se dore demasiado.
- Saltea la panceta en una sartén a fuego medio-alto hasta que se dore ligeramente. Reserva.
- Pela la cebolla y córtala en rodajas finitas. En la misma sartén de antes, dórala con un poquito de sal durante un par de minutos por ambos lados. Reserva.
- En un bol, casca los 3 huevos y espolvorea por encima pimienta negra recién molida. Añade la nata, la leche y una cucharadita de sal, y bátelo todo bien.
- Ahora incorpora la panceta que habías preparado. Ralla el queso que hayas elegido, y añádelo también a la mezcla. Ya tienes listo el relleno.
- Cuando la masa quebrada se haya horneado, déjala reposar 5 minutos a temperatura ambiente. Después echa dentro el relleno, pon las rodajas de cebolla en la superficie y añade tus especias favoritas por encima. Puede ser orégano, tomillo y romero.
- Vuélvela a introducir en el horno, a altura media y 190ºC durante 20-25 minutos, hasta que veas que la parte superior está dorada.